Los hechos ocurrieron la mañana del sábado 25 de febrero, cuando contrataron al veterinario Arturo Flores Ponce, para dos esterilizadas; cuya veterinaria se llama “Siempre a tú lado”, situada en Francisco I. Madero, del barrio de San Nicolás, perteneciente a San Pablo del Monte, Tlaxcala. 

El “Veterinario”, quedó de llegar a las 10:00am, pero fue hasta las 11:15am que llegó, al domicilio situado en el barrio de Tlaltepango, para llevarse a dos perritas, quienes estuvieron en ayuno como lo había indicado. 

Desde el momento en que llegó de muy mala manera se las llevó, bruscamente como si no fuera veterinario, como si no tuviera amor por su profesión, sin contar con lo necesario (casita, jaula, etc), a una de las perritas la metió a su cajuela y mencionó que las regresaría a las 3:00pm, una vez que despertaran de la anestesia. 

Dieron las 3:00pm, 4:00pm y las 5:00pm, tras varias llamadas, por fin, el veterinario contestó y dijo que en una hora las llevaba de regreso al domicilio donde las había recogido.  

Dieron las 6:30pm, se le volvió a llamar y no contestaba, tras varios intentos contestó y dijo que una no podía volver (se había pasado de anestesia), y que nomás que despertara, las llevaba al domicilio donde las recogió. 

Fue hasta las 9:30pm, cuando entregó a las dos perritas, de las cuales una nunca despertó de la anestesia, la entregó muerta, argumentando que nunca despertó y que no era su culpa. 

¿Se pasó de la anestesia?, ¿Se debilitó al llevársela dentro de su cajuela?, ¿Tardó en sacarla de la cajuela?, ¿La lastimó antes de esterilizarla?, eso solamente él lo sabe. Con voz burlona y arrogante, mencionó “Joven, cuando son perritos criollos esto puede suceder”. Cuando se le contestó que esto no se quedaría así, respondió “Me da igual, usted está en el derecho de hacer lo que quiera”. 

Cómo si un perrito criollo no tuviera el mismo valor que un perrito de raza, como si un veterinario de pueblo no tuviera el mismo valor que un veterinario de ciudad. 

Los perritos criollos tienen el mismo valor, cariño y respeto que un perrito de raza, porque sienten lo mismo. Es de “Veterinarios Mediocres”, discriminar un perrito criollo, cuando por “ética”, eso lo tuvieron que haber visto en su carrera, el amor por los animales sin importar la especie y condiciones. 

¡Mucho Cuidado!, con este tipo de veterinarios mediocres y sin ética. ¡Mucho Cuidado!, con veterinarias como “Siempre a tu lado”, situada en Francisco I. Madero, en el barrio de San Nicolás, perteneciente a San Pablo del Monte, Tlaxcala, donde confías en él, para que esterilice a tu perrita y te la entregan muerta.